El verano en Andalucía ya es especialmente duro para mí. La segunda ola de calor ya nos tiene atrapados y es poco probable que refresque en las próximas dos semanas. Lo que se está convirtiendo en algo vital para todos nosotros es el acceso al agua. Puedes instalar pequeños puntos de agua en tu propio jardín o en tu balcón para los pájaros y los insectos. Además de los pájaros, he visto lagartijas y pequeñas salamanquesas en mi bebedero, que por supuesto también tienen sed.

¿Y cómo lo hacen las abejas? El agua es igual de importante para ellas con estas altas temperaturas. Justo al lado de mis abejas hay una bañera y varias barriles con agua. Como a las abejas no les gusta beber de los puntos de agua abiertos, las ayudo con corchos flotantes, ramas y piedras.

Las abejas absorben el agua en sus buches de miel y la transportan de vuelta a la colmena. Allí distribuyen pequeñas gotas de agua en los panales con su lengua.

Mantengo las cajas de abejas en el mismo lugar durante todo el año. En invierno, es importante que dé mucho sol a las cajas, pero en verano, por supuesto, hace mucho calor. Por desgracia, no puedo poner las colonias a la sombra, porque los animales saben exactamente dónde está su casa. Sin embargo, lo que hago es pintar la tapa de blanco con cal. Así la tapa se calienta un poco menos.

Por cierto, no esperé a que llegara a los 40 grados para hacer este trabajo, porque ahora sí que no es muy divertido ponerse el grueso traje.