Una nueva abeja nace, mira qué peluda está todavía. Los pelos son claros y están repartidos por todo el cuerpo. Con el tiempo, estos pelos se rompen y se vuelven más oscuros, por lo que se puede distinguir fácilmente una abeja joven de otra un poco más vieja.

El desarrollo de la abeja, o de los insectos en general, es obviamente muy diferente al de los mamíferos. Sinceramente, siempre me resulta fascinante imaginar que una pequeña y suave larva sale de un huevo y en poco tiempo se convierte en una abeja con patas y alas. El proceso por el que pasa la abeja dentro de la celda, detrás de una cubierta de cera, se llama metamorfosis, una transformación completa de su forma. Un gusano sale del huevo, muda su piel 4 veces y luego entra en la fase de pupa o ninfa. Después de 2 mudas más, la abeja está completamente desarrollada y el exoesqueleto se endurece. Después de 21 días nace una nueva abeja obrera, el zángano tarda 24 días y la reina sólo 16.

En el siguiente vídeo puedes ver en sólo 1 minuto cómo se desarrolla la abeja. En realidad, siempre me gusta enseñaros mis propias fotos y vídeos, pero aquí National Geographic ha publicado un vídeo único y fascinante que tengo que compartir con vosotros.

https://youtu.be/0T8XK3XJfm8

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